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Suelten las amarras! y desplieguen las velas! A navegar el abismo





Con él yo sentía crecer un aire nuevo, los signos fabulosos del atardecer o esa manera como las cosas se dibujan cuando estábamos juntos y en las rejas de la Cour de Rohan los vagabundos se alzaban al reino medroso y alunado de los testigos y los jueces... ¿Por qué no habría de amarlo?
     

1 comentario:

  1. wow nunca me había percatado de que vos y marce eran/son (ni idea) novios, que lindos.
    Rayuela, es como el tunel que tienen los subtes para pasar de un vagón a otro, pasas por ahi, y descubris cosas nuevas, gente vieja pero que ahora es nueva y nose es lo mejor.

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